De un venezolado cuya voz no se oye en Telesur.
Esto es un poco de el sentir de el Venezolano real, el que no pertenece a el partido, el que no es Chavista, el pueblo oprimido que es mayoría, pero se ha visto silenciado, el que ya no puede gritar, el que ya no puede decir, y que por razones obvias me pide que publique estro sin revelar su identidad.
1ro de Mayo, un dia de un venezolano de a pie...
Ayer no podía dormir, estava preocupado por algunos pagos que debo hacer. Aquí en el barrio, como de costumbre, hubo un tiroteo. Me costo levantarme temprano, se me pegaron las cobijas y salí retardado, no me dio tiempo ni de desayunar.En la parada tuve que esperar mas de una hora la camioneta, el metro tenia retraso,y había más gente que de costumbre, además las camionetas no querían trabajar por que mataron a un compañero para robarlo.Cuando llegue al trabajo, habían unos funcionarios del SENIAT notificando una multa. No quise preguntar nada por que había llegado tarde y se notaba la tensión en el ambiente. El jefe tenia cara de preocupación y entre dientes comentaba sobre el rumbo que el país había tomado.Nos pusieron toda la mañana a hacer inventario, cerca de la hora de salir para almorzar nos dijeron que teníamos reunión antes de irnos por la tarde, el jefe nos hablaría. No le preste mucha atención, tenia bastante hambre. Debía comprar algunas cosas que hacían falta en la casa. Pase por el automercado y me lleve una sorpresa cuando fui a pagar, no hacia ni dos semanas que compre un kilo de tomates en 2000 bs. y un kilo de carne en 11.000 bs, hoy estavan casi al doble. Mi sueldo no me estaba rindiendo para nada. Pensé en no quejarme y mejor dar gracias a dios por tener salud.De regreso al trabajo, pare en el carrito de perro calientes y como dos con una malta. Pague 6.000 bs., Dios mio si sigo comiendo en la calle me voy a arruinar, pero es si se prepara comida para traerme, gasto el doble por que necesito mas en la casa, están los chamos, mi suegra y el perro.Transcurrido la tarde con cierto ajetreo, el contador nos tenia a monte, sera que ese carajo piensa que aun vivimos en la época de los esclavos, en lo que pueda hablare con el delegado sindical, además es mi compadre.Como una hora antes de la salida, nos llamaron para la reunión que se había convocado. Estaban los de sindicato, el jefe y dos señores que me dijeron eran los dueños de la empresa. Así sin anestesia ni nada nos anunciaron una reducción de personal y el cierre definitivo en 6 meses a mas tardar. los dueños se regresaban a su país. El sindicato nos garantizo un arreglo razonable y que hablaría con cada uno. A mi no me toco salir por ahora pero a mi vecino si. Me dio mucho sentimiento, tiene 5 hijos y a sus hermanos viviendo con el. Como iba a hacer ahora sin trabajo.Salí rápidamente de la reunión, había durado más de hora y media y ya se hacia tarde para llegar a casa. Caminando miraba para todos lados y a cualquiera que estuviera cerca lo veía sospechoso, siempre me la pasaba paranoico. Tenia razones para estarlo. Todos los días en el barrio era normal ver un robo por la calle, además la prensa siempre decía cuantos murieron en manos del hampa.Cuando llegue a casa escuche un llanto en el cuarto, era mi esposa que no le había ido muy bien que digamos, el tipo para el que trabajaba en un puesto de sabana grande, había recogido el tarantín por que la policía los desalojo y ella quedo fuera. Tenia una año sin trabajo y se vio necesitada por que mi sueldo no alcanza y ser buhonera fue el única recurso que le quedo. Además, lleva ya 6 meses haciendo cola frente al organismo de la vivienda a ver si consigue una planilla. Mi suegra le hace el quite cuando le tocaba trabajar.Hablamos un rato, le conté para animarla los buenos propósitos de nuestro presi y que la cosa pronto mejoraría. Por supuesto no le conté sobre la reunión de mi trabajo. Llegaron los niños del colegio con mi hermana que me hace el favor todos los días de ir a recogerlos. Cene con mi familia, me acosté a dormir cansado y rogándole a dios que el día de mañana sea mejor que el de hoy.
Amigo lector, esta crónica se ve en la oblación de advertirle que cualquier parecido de esta historia con tu vida cotidiana no es mera coincidencia, es la cruda realidad de muchos venezolanos.
FELIZ (¿?) DÍA... Trabajador
Ayer no podía dormir, estava preocupado por algunos pagos que debo hacer. Aquí en el barrio, como de costumbre, hubo un tiroteo. Me costo levantarme temprano, se me pegaron las cobijas y salí retardado, no me dio tiempo ni de desayunar.En la parada tuve que esperar mas de una hora la camioneta, el metro tenia retraso,y había más gente que de costumbre, además las camionetas no querían trabajar por que mataron a un compañero para robarlo.Cuando llegue al trabajo, habían unos funcionarios del SENIAT notificando una multa. No quise preguntar nada por que había llegado tarde y se notaba la tensión en el ambiente. El jefe tenia cara de preocupación y entre dientes comentaba sobre el rumbo que el país había tomado.Nos pusieron toda la mañana a hacer inventario, cerca de la hora de salir para almorzar nos dijeron que teníamos reunión antes de irnos por la tarde, el jefe nos hablaría. No le preste mucha atención, tenia bastante hambre. Debía comprar algunas cosas que hacían falta en la casa. Pase por el automercado y me lleve una sorpresa cuando fui a pagar, no hacia ni dos semanas que compre un kilo de tomates en 2000 bs. y un kilo de carne en 11.000 bs, hoy estavan casi al doble. Mi sueldo no me estaba rindiendo para nada. Pensé en no quejarme y mejor dar gracias a dios por tener salud.De regreso al trabajo, pare en el carrito de perro calientes y como dos con una malta. Pague 6.000 bs., Dios mio si sigo comiendo en la calle me voy a arruinar, pero es si se prepara comida para traerme, gasto el doble por que necesito mas en la casa, están los chamos, mi suegra y el perro.Transcurrido la tarde con cierto ajetreo, el contador nos tenia a monte, sera que ese carajo piensa que aun vivimos en la época de los esclavos, en lo que pueda hablare con el delegado sindical, además es mi compadre.Como una hora antes de la salida, nos llamaron para la reunión que se había convocado. Estaban los de sindicato, el jefe y dos señores que me dijeron eran los dueños de la empresa. Así sin anestesia ni nada nos anunciaron una reducción de personal y el cierre definitivo en 6 meses a mas tardar. los dueños se regresaban a su país. El sindicato nos garantizo un arreglo razonable y que hablaría con cada uno. A mi no me toco salir por ahora pero a mi vecino si. Me dio mucho sentimiento, tiene 5 hijos y a sus hermanos viviendo con el. Como iba a hacer ahora sin trabajo.Salí rápidamente de la reunión, había durado más de hora y media y ya se hacia tarde para llegar a casa. Caminando miraba para todos lados y a cualquiera que estuviera cerca lo veía sospechoso, siempre me la pasaba paranoico. Tenia razones para estarlo. Todos los días en el barrio era normal ver un robo por la calle, además la prensa siempre decía cuantos murieron en manos del hampa.Cuando llegue a casa escuche un llanto en el cuarto, era mi esposa que no le había ido muy bien que digamos, el tipo para el que trabajaba en un puesto de sabana grande, había recogido el tarantín por que la policía los desalojo y ella quedo fuera. Tenia una año sin trabajo y se vio necesitada por que mi sueldo no alcanza y ser buhonera fue el única recurso que le quedo. Además, lleva ya 6 meses haciendo cola frente al organismo de la vivienda a ver si consigue una planilla. Mi suegra le hace el quite cuando le tocaba trabajar.Hablamos un rato, le conté para animarla los buenos propósitos de nuestro presi y que la cosa pronto mejoraría. Por supuesto no le conté sobre la reunión de mi trabajo. Llegaron los niños del colegio con mi hermana que me hace el favor todos los días de ir a recogerlos. Cene con mi familia, me acosté a dormir cansado y rogándole a dios que el día de mañana sea mejor que el de hoy.
Amigo lector, esta crónica se ve en la oblación de advertirle que cualquier parecido de esta historia con tu vida cotidiana no es mera coincidencia, es la cruda realidad de muchos venezolanos.
FELIZ (¿?) DÍA... Trabajador
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